Si hay algo que alguna vez llegamos a criticarle a las fachadas de casas minimalistas era la falta de color y detalles que las conviertan en una vivienda distinta al resto. Si bien la arquitectura minimalista se caracteriza por la sencillez que presentan sus diseños, contar con un plus como puede ser una parte de su frente revestido en piedra o la presencia de un detalle de color, puede cambiar radicalmente el estilo de la misma.
Este último es el caso de la casa minimalista que les compartimos hoy a través de estas imágenes. Vemos que si bien su fachada presenta un diseño que no escapa al de los trazos sencillos y rectos que estamos acostumbrados a ver en este estilo de viviendas, ciertos accesorios y detalles coloridos que se aprecian en sus interiores a través de los grandes ventanales, aportan un lindo y atractivo agregado al diseño de la residencia.
Si bien se han utilizado algunos muebles en colores llamativos (como puede ser el sillón verde que se aprecia en la imagen anterior), el principal detalle que sobresale a simple vista es su moderna escalera en color naranja. Emplazada en el centro de esta vivienda minimalista, esta escalera de tipo “caracol” se encuentra pintada en un naranja muy llamativo, lo que hace que pueda divisarse fácilmente desde cualquier ángulo desde el que se aprecie la vivienda y tenga ventanas.
Sin duda alguna, tanto de día como de noche, es innegable que esta escalera en color naranja aporta un detalle diferente a esta casa minimalista. Acompañada por muebles blancos que no resaltan al ser contrastados con el color de la fachada, la presencia de este acceso a la segunda planta luce imponente y es lo primero que uno observa al posar la vista sobre la vivienda.
Si bien en este caso no encontramos una presente, creemos que una de esas piscinas de formas alargadas que acompañan el diseño de una fachada, podría haber significado un fantástico detalle para esta vivienda minimalista.